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Hoy mientras viajabamos en el metrobus de vuelta a casa, subio un grupo de amigos onda 17-20 con un señor y empezaron a hablar muy seriamente sobre politica. Una del grupito en especifico defendio una serie de estupideces con un discurso cantinflesco hasta el grado de soltarse el chongo (metaforica y literalmente). El señor asistia con la cabeza, mirando emocionado por el entusiamo y el resto del grupo solo escuchaba.

El momento en sí me recordo una cosa.

Que se sentia cuando tenia 19 años.
Cuando tenia 19, lo sabia todo, lo entendia todo, lo podia todo.

Lo extraño de eso es que ahora no me siento igual.

A los 26 no lo se todo, no lo entiendo todo, no lo puedo todo.

No porque no sea un genio (ja) sino por que es muy estupido pretender todo eso a cualquier edad, asi tengas 123 años.
A los 19 no sabia quien era Pulp, no usaba zapatos de 22 cm, no habia probado el vino espumoso rosado, no habia salido con alguien 7 años más grande que yo, no habia hecho una página web, no habia visto nevar.

Hoy se siente bien estar viva aún con todo lo que falta. Porque sea bueno, excelente, apestoso o una mierda esta esperando por mi, talvez aprenda algo nuevo.
Y tal vez cuando tenga 123 me sienta de nuevo como cuando tenia 19